El encuentro presencial es mucho más efectivo para propiciar el dialogo y la formación entre personas, pero cuando este tipo de encuentros no son posibles por las distancias, los encuentros virtuales pueden ser una solución, aunque están condicionados al acceso de ciertas tecnologías, al manejo que las personas tengan sobre estas tecnologías y a las competencias de las personas para interactuar en este tipo de medios.