Intersticios para promover la creación de publicaciones abiertas y comunitarias en las instituciones educativas

A continuación se presenta las diapositivas y la reseña de la charla “Intersticios para promover la creación de publicaciones abiertas y comunitarias en las instituciones educativas” preparada para la Semana de la educación abierta (Open Education Week) en Bogotá: Construcciones comunitarias de apoyo a los procesos de aprendizaje junto con Marcela Hernández.

1. Contexto
Esta presentación pretende mostrar, por una parte, los principales obstáculos culturales que existen para que personas y organizaciones se involucren en la creación de publicaciones propias, más aún si éstas se plantean desde una perspectiva abierta y comunitaria, y, por otra, la manera como se superaron estos obstáculos en la elaboración colectiva del libro Crear y publicar con las TIC en la escuela, publicación que se realizó en el contexto de un contrato que la Universidad del Cauca tuvo con el programa Computadores para Educar, entre el año 2010 y 2011, a través del cual desarrolló la Etapa de Formación y Acompañamiento de docentes de escuelas públicas en los Departamentos de Cauca, Nariño y Putumayo, para la integración de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) en entornos escolares.
Pero ésta no es una experiencia aislada, sino el resultado de la política de producción de saber desde dinámicas colectivas y abiertas, que impulsa la Red de Investigación Educativa – ieRed. Esta red es liderada por el Grupo de Investigación en Enseñanza de las Ciencias y Contextos Culturales (GEC) de la Universidad del Cauca, cuyo propósito es establecer un diálogo entre las experiencias pedagógicas escolares y la producción académica de las escuelas normales y las universidades.
Entre otros ejercicios de producción y publicación se encuentran la Revista ieRed (2004-2006), una revista académica con licencia Creative Commons de la cual se realizaron cuatro números. A través de ella se generó una dinámica académica que, más allá de los títulos, promovió la colaboración y el acompañamiento de la producción escrita. http://revista.iered.org
Igualmente, se promovió el uso de la licencia Creative Commons para la publicación de todos los módulos, libros y demás materiales elaborados para el trabajo con maestros en el marco de los dos últimos contratos con Computadores para Educar (2009-2011) y en colaboración con el Grupo de Investigación en Tecnologías de la Información (GTI) de la Universidad del Cauca. http://www.iered.org/libros/
Actualmente estamos trabajando en la implementación de un blog, como espacio de publicación más ágil e informal que una revista académica, aunque con algunas lógicas de línea editorial, y en la elaboración de una propuesta metodológica de trabajo con maestros en formación, maestros en ejercicio y formadores de maestros, para avanzar hacia procesos de conceptualización de la propia experiencia pedagógica del docente, desde la sistematización colectiva y la producción escrita de acceso abierto.
Lo que destaca al libro “Crear y publicar con las TIC en la escuela”, como producción abierta y comunitaria, es que recoge y permite conocer diversas voces y experiencias que, regularmente, no tienen la intención de expresarse de manera escrita, haciéndolas a través del libro, parte de un proyecto de producción de amplia distribución y uso.
2. Dificultades
Representamos las dificultades culturales para la publicación como grandes bloques que obstaculizan y desestimulan la creación en cualquiera de sus manifestaciones (textual, audiovisual, interactiva), a la vez que generan fuertes resistencias para participar en publicaciones colaborativas y para utilizar licencias abiertas. Sin embargo creemos que entre estos grandes bloques de dificultades existen espacios, huecos e intersticios a través de los cuales, así sea de manera estrecha, es posible moverse para lograr la creación de publicaciones abiertas y comunitarias.
Para empezar, miremos cuáles son las grandes dificultades que se han identificado:
La primera dificultad tiene que ver con el acto de crear. Escribir (en cualquiera de sus manifestaciones) no es fácil, ya que para ello no sólo basta con tener ideas, sino que también es necesario tener el deseo de compartirlas, y la voluntad para hacerlo de una determinada forma. La cuestión es que, culturalmente, somos muy dados a hablar, a crear discursos orales sobre lo que pensamos, sobre lo que hacemos y/o sobre lo que sentimos, pero no tenemos la misma facilidad para crear textos, materiales audiovisuales, interactivos, etc. que contengan adecuadamente aquello que se quiere expresar.
Para publicar una idea será necesario definir cómo la voy a estructurar y organizar, a través de un producto concreto, con el propósito de que otros conozcan claramente lo que pienso, siento o hago, lo que exige un esfuerzo diferente al hecho de consumir, copiar o sólo repetir una información sin agregar nada nuevo. Crear es así una forma de reconocerse y reafirmarse en la propia experiencia, pues significa detenerse a estructurar y aclarar las ideas para que éstas sean entendidas por los demás.
Sin embargo este ejercicio de expresión no encuentra espacios de fomento en una sociedad que le da más importancia al consumo que a la creación. Hoy todo se compra, de hecho es fácil notar que cada vez son menos cosas las que sabemos hacer con nuestras propias manos, en este mismo sentido estamos en una dinámica constante de recibir, copiar y replicar información que otros producen, pero rara vez pensamos en producir nueva información o información propia.
Superar esta primera dificultad implica pensar entonces en las situaciones, oportunidades o escenarios que pueden facilitar e incentivar la creación orientada a la publicación.
La segunda dificultad está relacionada con el propósito o la intención con la que las personas publican. Para empezar está que la motivación general de las pocas personas que piensa en publicar es recibir una remuneración económica por hacerlo, pero como esta condición generalmente no se da, entonces desisten. Igualmente, está el miedo a no ser reconocido por las ideas que se publican, más concretamente que otro se robe o haga plagio de mis ideas y se beneficie económicamente con ellas. Bajo estas dos situaciones se acepta de manera natural la idea de propiedad individual que promueve el derecho de autor, la cual está orientada al cobro o retribución económica por el acceso a lo creado.
Sin embargo, este es un panorama paradójico, pues al no publicar se cierra la posibilidad de ampliar los alcances de las ideas, mientras que al hacerlo se procura más oportunidades para que otros conozcan lo que se está pensando o haciendo, y estén dispuestos a pagar o hacer cosas por conocer más. Es contradictorio querer publicar y que otros paguen por ello, pero no tener quién esté dispuesto a pagar porque no me he posicionado como escritor o académico. Por otra parte, realmente el pago por contenidos no protege las ideas, ni evita su difusión o su uso.
En las universidades colombianas es frecuente encontrar esta idea: Esperan que la producción de sus profesores les represente reconocimiento académico a nivel nacional e internacional, pero al mismo tiempo espera tener utilidad por la venta de esta producción. Sin embargo cuando la universidad o los profesores no son de gran trayectoria, el cobro por el acceso a sus publicaciones desestimula la consulta y, por tanto, se restan posibilidades de ser conocidos y referenciados en el mundo académico. Esta situación igualmente puede trasladarse a cantantes y escritores, entre otros campos de producción.
Respecto a esta dificultad vale finalmente indicar que ese énfasis en la remuneración económica tan arraigado en la sociedad actual, representa una única y limitada manera de darle valor al acto de crear y compartir las ideas mediante procesos de publicación. Si bien la productividad económica está arraigada y es estimulada en las instituciones, entidades y organizaciones, incluso en las públicas, es necesario que reconozcamos que existen también otras motivaciones y necesidades que no representan lucro pero sí son parte fundamental del equilibrio y desarrollo personal y social.
La tercera dificultad tiene que ver con el predominio de lo individual sobre lo social, lo colectivo o lo comunitario. La sociedad de hoy nos lleva a competir como individuos constantemente, bajo la idea de que es el camino para alcanzar el éxito. Sin embargo esta idea implica que la sociedad se organiza como una pirámide, en donde unos pocos alcanzan la cumbre y se posicionan encima de la mayoría. El problema de esta forma de asumir las relaciones humanas, es que plantea una sociedad donde predomina la desconfianza y la injusticia, generando resentimiento, odio, resistencia, y creando las condiciones propicias para que se produzca violencia (en el lenguaje, en las acciones, etc.).
Ejemplos de esto suele suceder frecuentemente en la academia: el profesor que utiliza los aportes de sus estudiantes para publicar sin dar ningún reconocimiento (ni económico, ni moral), o el investigador que estudia una comunidad (indígena, negra, campesina, desplazada, etc.) para ganar prestigio en comunidades académicas nacionales e internacionales, pero que asume de manera utilitarista su relación con la comunidad, entre otros casos. Sin embargo es posible entender la sociedad de otra manera, pues estas ideas, como creaciones sociales, no constituyen la única forma de entender el mundo y la vida.
3. Estrategias (Intersticios)
Lo presentado son las grandes dificultades que hemos encontrado al asumir iniciativas de crear publicaciones abiertas y colectivas. A continuación comentaremos esos intersticios, esos pequeños espacios de acción a través de los cuales nos hemos movido para lograrlo, particularmente planteándolo desde el caso de la publicación del libro “Crear y publicar con las TIC en la escuela”.
El propósito del libro era poder mostrar a los docentes de escuelas, principalmente rurales, no sólo algunos programas que podrían utilizar con sus estudiantes en el aula, pues en Internet hay manuales o tutoriales sobre casi cualquier software, sino que tuviera indicaciones, sugerencias y ejemplos de usos realizados por colegas como ellos. Por tanto, consideramos que lo mejor era invitar a escribir a los formadores que estaban haciendo la labor de formación y acompañamiento de maestros para la apropiación pedagógica de las TIC en el marco del contrato entre Computadores para Educar y la Universidad del Cauca.
Para abordar entonces la dificultad de crear, se partió por reconocer la experiencia de los formadores-autores en torno a las temáticas de interés para el libro. Se procuró que escribieran y profundizaran en temas que hacían parte de su labor diaria, con lo que nos aseguramos que su producción se centrará en plantear las ideas aplicadas por ellos en la práctica. Con ello se buscó evitar el miedo que genera la hoja en blanco o el no saber qué decir, pues los textos debían reflejar temas cotidianos de su experiencia de trabajo, en la que algunos llevan un año, pero otros tenían más de dos o tres años de trabajo con los maestros. Igualmente, dado que lo solicitado no es algo que se encuentre en Internet, porque es muy propio de la experiencia, se evitó la tentación de que los autores se limitaran a descargar información de tutoriales y organizarla para presentarla.
Una característica de estos formadores, muchos de ellos licenciado y otros ingenieros jóvenes, es que si bien tenían buen manejo del computador y de Internet, y un buen dominio de las situaciones de enseñanza y aprendizaje que se dan cuando se trabaja el tema de las TIC con adultos, había dificultades para escribir. Para la mayoría su experiencia de escritura no había pasado de los trabajos presentados en la universidad y de la escritura del informe final para obtener su título profesional, particularmente por ser de áreas donde desarrollar esta habilidad no es lo central.
Partiendo entonces de la experiencia profesional de los autores y reconociendo la situación de dificultad de escritura, se planteó una guía general para los textos, a manera de estructura, donde se indicaban los aspectos relevantes a abordar en los textos, a fin de que supieran qué ir contando de lo que conocían y qué complementar. Igualmente se realizó un acompañamiento permanente en la escritura, la cual consistió en recibir casi a diario, por correo electrónico, los avances que los autores iban haciendo y, sobre ellos, se realizaban comentarios, sugerencias y correcciones, regresando los archivos por el mismo medio. Igualmente se programaron algunas reuniones presenciales para discutir perceptivas, diferencias y dudas sobre el enfoque o el contenido del texto. Esta labor se realizó de manera intensiva durante dos semanas.
Una vez se tuvo los manuscritos, se contó con una persona del mismo equipo para realizar la revisión de estilo y la diagramación inicial del libro. El incluir esta labor como parte de sus actividades en un proyecto fue lo que permitió generar una primera versión del libro, la cual se utilizó como material guía para el trabajo de formación y acompañamiento de los mismos formadores.
Para superar la segunda dificultad, relacionada con la idea de que toda producción debe ser privativa y generar remuneración económica, se aprovechó la relación contractual entre los formadores con la Universidad del Cauca y entre esta institución con Computadores para Educar.
En virtud del contrato entre Computadores para Educar y la Universidad del Cauca, los derechos patrimoniales son de propiedad de Computadores para Educar, y dado que en las Ordenes de Prestación de Servicios de los formadores se establecía que para realizar la labor de formación y acompañamiento de maestros para la apropiación pedagógica de las TIC, se debían crear materiales de apoyo, se logró coordinar tiempos y cronogramas para que algunos de ellos tuvieran dos semanas en las que se pudieran concentrar a esta labor.
De esta manera los derechos patrimoniales de los manuscritos pasaron a ser de Computadores para Educar, lo cual fue favorable considerando que en el mismo contrato intersintitucional se indica que los materiales, software y demás recursos utilizados o elaborados en el desarrollo de las actividades deben ser de distribución gratuita, siendo lo que permitió que se utilizaran estos manuscritos para la publicación del libro y que finalmente éste fuera publicado con una licencia Creative Commons Reconocimiento – No comercial.
Así que se puede decir que sí hubo una remuneración por la elaboración de los manuscritos y también para la edición, dado que se realizaron como labores asignadas dentro de tiempos del contrato. Sin embargo, esta no era una labor central, por lo que el mérito también estuvo en que todo el equipo de autores y editores empezaron a ver el valor del trabajo que se estaba realizando, no sólo por sentirse parte de un proyecto editorial de gran envergadura (un libro de 300 páginas con un tiraje inicial de 1000 ejemplares que se distribuyeron en escuelas publicas en el suroccidente colombiano, además de la distribución digital por Internet), sino porque esta producción estaba centrada en la propia experiencia y la de los maestros a los que se ha acompañado y, sobre todo, porque sería una publicación que más allá de quedarse en los anaqueles de una biblioteca, sería de utilidad para muchas personas.
Fue importante entonces generar la seguridad de que el tiempo dedicado a la labor tendría un resultado concreto y de utilidad colectiva, pues el libro sería distribuido entre las sedes educativas de la región donde se trabaja.
En tercer lugar, vencer la idea de un trabajo individualista fue lo que permitió hacer posible esta publicación. Ninguna de las personas que tuvimos la idea inicial tenia el tiempo ni el conocimiento total y profundo para sacar adelante esta publicación, así que la sinergia producida por este proyecto interinstitucional, como por el trabajo de formadores y editores, junto con los coordinadores del proyecto, posibilitaron que todos saliéramos ganando, en un esquema donde se reconoció y se visibilizó el aporte de cada quien. Esto generó una ruptura sobre la idea convencional de que lo que expresan quienes hacen parte de la base en el trabajo no trasciende, pues sólo los jefes generan contenidos, lineamientos e información para todos. En este caso, se generó una relación horizontal de visibilidad, donde los formadores involucrados participaron de un proyecto donde su producción alimentaría su propio trabajo, el de otros formadores, docentes formación e incluso de los coordinadores.
4. Conclusiones
La principal conclusión que sacamos, es: aprovechar las condiciones y oportunidades del medio para encontrar intersticios a las grandes dificultades para la creación y publicación abierta y colectiva. En este caso, estas condiciones y oportunidades fueron:

  1. Una visión clara de lo que se quería lograr y un liderazgo asertivo.
  2. Personas con las capacidades y dispuestas a trabajar más allá de lo exigido.
  3. Gestión de algunos espacios de tiempo remunerados.
  4. Recursos para la publicación y la distribución física, y el aprovechamiento de servicios para la distribución digital.

Sobre este último punto resaltamos la labor de la Fundación Internet Archive, quien cuenta con toda una infraestructura telemática para el almacenamiento gratuito de cualquier tipo de archivo con licencia abierta (http://www.archive.org), y para la reseña de cualquier libro producido por la humanidad (http://openlibrary.org).