Utilizando varias cámaras Kinect y algunos prototipos de proyectores “pico”, se demuestran diversas aplicaciones que nos hacen pensar en aplicaciones fantásticas en juegos, museos, aprendizaje e incluso interacción a distancia. Quizá lo único que hace falta es un par de lentes 3D que hagan totalmente creíble lo que ya puede generarse en términos de interacción.