Baruch de Spinoza, gran filosofo racionalista del Siglo XVII y amante de Dios y la Naturaleza, escucha decir a Dios:
“Deja ya de estar rezando y dándote golpes en el pecho! Lo que quiero que hagas es que salgas al mundo a disfrutar de tu vida. Quiero que goces, que cantes, que te diviertas y que disfrutes de todo lo que he hecho para ti.”