10 reflexiones sobre crowdfunding


Terminó la primera ronda de cofinanciamiento para editar y publicar el libro La Vuelta al mundo puerta a puerta, superando el 100% del capital mínimo. Decidir realizar este proyecto a partir del cofinanciamiento fue una gran elección, una experiencia increíble que a parte del dinero necesario me ha aportado muchas cosas más, y quería recoger aquí algunas impresiones y reflexiones.

1. Pasos previos

Han sido 40 días de campaña, pero que requieren muchos más de preparación. Y es precisamente en esos pasos previos, cuando empiezas a preguntar y compartir tu proyecto que lo vas mejorando. Tu realizas una propuesta a la plataforma de crowdfunding elegida (en este caso Goteo.org) y el sólo hecho de rellenar el formulario y seguir sus indicaciones ya te obliga a explicar tu proyecto de forma que sea atractivo e interesante para que los demás te apoyen. En otras plataformas lo desconozco, pero en el caso de Goteo se produce un feedback muy valioso para tu proyecto; desde consejos y recomendaciones para la difusión hasta qué aspectos pueden ser más relevantes de destacar o enfatizar en la ficha del proyecto.
En estos pasos previos también es necesario recoger y preparar material gráfico que se utilizará durante la campaña. Por ejemplo, un vídeo de presentación e imágenes, no sólo para la ficha sino para ir creando “noticias” y actualizaciones durante la campaña, que serán clave para la difusión.
Es importante ser consciente que la plataforma y sus promotores van a ayudar en todo lo que puedan pero quien realmente tiene que luchar por el proyecto es su autor. Y requiere dedicación y tiempo, las donaciones no vienen solas.

2. El objetivo


Debido a que la mayoría de proyectos de crowdfunding son a “todo o nada”, decidir el importe mínimo que se quiere conseguir es muy importante. Si ponemos un número muy alto, será más difícil de conseguir… Si lo ponemos más bajo, es más fácil asegurarse conseguir el 100% y después todavía se podrá seguir aportando, pero quizás no conseguimos todo lo que necesitaríamos.
Hay que decidir si se va a pedir el 100% del dinero que se necesita o si solo una parte. También es muy importante hacer unos contactos previos para saber si algún amigo, institución o empresa estaría interesada en colaborar/patrocinar con una mayor cantidad, y así nos aseguramos que si cuesta de arrancar o de llegar al mínimo, tenemos una baza para jugar.
Según las estadísticas de Kickstarter, el 90% de los proyectos que superan el 30% de financiación, acaban con éxito. Por lo tanto, es interesante poner un objetivo el 30% del cual tengamos claro que podremos asumir con nuestr entorno cercano en el mínimo tiempo posible.

3. Las recompensas

Añadido al interés, simpatía y sinergias que genere el propio proyecto, el crowdfunding se basa en una recompensa que daremos a cambio de las donaciones. Es muy interesante repasar todos los demás proyectos en marcha, y en otras plataformas, para conocer que recompensas dan a cambio. Valorar si esas recompensas nos atraen o no, el porque, y a partir de ese análisis establecer las nuestras propias en función de nuestro “producto”.
A parte de pensar en recompensas atractivas, lo más importante es analizar muy bien el coste/beneficio que tendrá cada una de ellas.
En mi caso, pedía un presupuesto mínimo de 3500 euros que incluye los gastos de edición y maquetación del libro pero que también tiene que cubrir los costes de las recompensas, envíos, etc. Y aquí es donde hay que dedicar mucho tiempo a valorar a que precio se ofrece cada recompensa para buscar un porcentaje óptimo entre las recompensas ofrecidas y el coste que tiene… Del 100% total del dinero recaudado, ¿cuánto va a ser destinado a recompensas? Buscar el más bajo posible es el quid de la cuestión, manteniendo las recompensas lo más atractivas posibles y a precios también “fáciles” de colaborar.
Si yo pensaba en un libro, sabía que ofrecer el libro a cambio de la recompensa, tenía un coste bastante elevado, y me daba menos margen de beneficio… Así que ofrecí unas recompensas que no incluían el libro, y añadía algo más a las que si que lo incluían.
Si todos los cofinanzadores hubieran optado por la recompensa de 35 euros que incluía el libro, y que era la que me daba menos margen de beneficio, tal vez hubiera llegado al 100% igual pero con los gastos de recompensa no cubriría los costes de producción del libro. Y aquí es donde juega un poco el azar (saber si mucha gente va a querer aportar, pero poca cantidad, o poca gente aportará cantidades mayores). Y como en Goteo tienes la posibilidad de limitar cada tipo de recompensas, te permite hacer algunas aproximaciones (incluso creé una hoja de cálculo) para ir probando cual era la combinación óptima de recompensas y sus costes/beneficios que tenía que utilizar. Para mi esta era la parte más delicada e importante de todo el proyecto. Hay que planificar y prever el peor escenario.
Kickstarter Schools tiene más información y datos sobre esto… La recompensa más popular entre sus proyectos, es la de 25$ y la donación media llega a los 70$. Proyectos que NO ofrecen recompensas menores de 20$ tienen éxito el 35% de la veces; proyectos que SI tienen estas recompensas menores, tienen éxito el 54% de las veces.

4. La difusión


Para conseguir donaciones, base del crowdfunding, cuanta más gente conozca el proyecto, más posibilidades de recibir apoyos. Así que aunque parezca obvio, la difusión es clave.
Yo preparé un “calendario” con los diferentes grupos de contactos y vías de difusión que tenía, para organizarme durante los 40 días e ir atacando cada foco determinado en el momento concreto, de forma que se mantuviera una actividad de difusión constante sin llegar a ser abusiva ni spam.
Ir activando diferentes grupos de contactos en diferentes momentos, genera un efecto de difusión en diferentes entornos en diferentes momentos, de forma que no cansas a todos a la vez, y se mantiene el ritmo de difusión necesario.
Twitter y Facebook son dos de los mejores aliados que permiten llegar a mucha gente, difundir las actualizaciones del proyecto cada semana, por ejemplo, y seguir presente en los que ya lo conocen pero que todavía no se han decidido (ver punto 9).
Los medios tradicionales (radios, televisión, periódicos) se están haciendo mucho eco de proyectos financiados colaborativamente, y es una buena oportunidad para aprovechar y mandar notas de prensa explicando el proyecto.
Y no debemos menospreciar el email, el teléfono y el contacto directo para recordar de forma mucho más personalizada a los amigos y familiares más cercanos o contactos más directos, la importancia que tiene para nosotros este proyecto y como con su pequeña aportación se puede conseguir mucho. Sobretodo pedir ayuda en la difusión; solos no lo conseguiremos.

5. Amigos y familiares

Este es el grupo principal, va a ser la base y apoyo principal del proyecto (sobretodo en los proyectos más individuales). Solamente nosotros conocemos la relación que tenemos con nuestros familiares y amigos y hasta que punto van a colaborar con nosotros. Escribirles de forma más personalizada que a los demás, pidiendo su ayuda y colaboración y sobretodo, si no puede ser económica, en la difusión.
Hay que tener un núcleo muy cercano de total confianza para que se pueda llamar cuando sea necesario… Hay momentos críticos que tienen menor actividad de donaciones (sobretodos en la mitad), y que resulta útil pedir a ese amigo o familiar que dijo que quería colaborar, para que lo haga en ese momento concreto y así se vaya manteniendo un ritmo constante de donaciones. Estamos en campaña y hay que mantener el ritmo y el pulso constante para que no decaiga y llame el interés de más gente.

6. La estrategia

Este gráfico de Kickstarter puede ayudar a planificar la estrategia a seguir y a organizar esas donaciones que podemos tener ya confirmadas de antemano, para que se mantenga el pulso del proyecto. Según las estadísticas, hay una alta participación en los primeros días que va descendiendo hasta el “valle” para volver a subir al final.

Recordar lo importante que es, según estas estadísticas, llegar al 30% lo antes posible. Si el 90% de los proyectos que consiguen el 30%, tienen éxito, cuando antes se consiga esta cifra, más días de campaña tendremos para conseguir el resto.

7. La estrategia (2ª parte)

Ya que el dinero solamente se hace efectivo si se llega al 100%, hay que calcular muy bien las donaciones y hasta que punto estamos dispuestos a añadir nosotros dinero para no perderlo todo… Si el autor pone dinero de su bolsillo, una parte va a ser destinada a la comisión de la plataforma, pero si se está al 87% y quedan pocas horas, o se invierte el dinero que falta o se pierde todo. Así que hay que haber previsto esta situación y decidir hasta donde podemos/queremos llegar, o si nos sale a cuenta o no…
En mi caso, esto no fue necesario y aún así, pasado el día que se cubrió el 100% seguía recibiendo aportaciones. Pues hay gente que ha ido siguiendo la evolución del proyecto y al ver que se va a cumplir, deciden colaborar. Por cierto, quedan 30 días en los que puedes seguir colaborando!!
Y muy importante cuidar y agradecer mucho cada una de las donaciones, que los cofinanciadores se sientan satisfechos de haber colaborado va a ayudar a que lo cuenten a otras personas y nos sigan apoyando. Al igual que ir informando periódicamente de la evolución del proceso, pues no todos entran cada día a la web para verlo.

8. Otro tipo de actividades


En la mayoría de casos, un proyecto así implica que todos los que te quieran ayudar, se tendrán que registrar en la plataforma, pagar vía Paypal o tarjeta de crédito, etc. Entonces tu te conviertes en el técnico informático que tiene que darles respuesta en solucionar los errores de registro, si una tarjeta no funciona, si no les deja registrar porque el nombre de usuario ya existe… tu les has invitado a colaborar y eres su punto de referencia, ellos te van a preguntar a ti. Hay que asumir también esta parte de ayuda con buen humor. Si el proyecto es de un solo autor, toca hacer de todo :)
Además, como no todo es cuestión de dinero, este proceso es un momento óptimo para conseguir otro tipo de colaboraciones y ayudas para el proyecto. Gente que se ofrece a traducir, o para tareas más concretas de difusión, a ofrecer apoyo logístico, etc. todo suma!

9. Paciencia, paciencia y paciencia

Aquí aplica perfectamente el refrán sin prisa pero sin pausa, o aprovechando el símil de Goteo, regando el proyecto gota a gota.
A pesar de nuestro gran esfuerzo de comunicación y difusión, no todas las personas interesadas en colaborar lo van a hacer en el momento que reciben la notificación… simplemente no tienen la tarjeta de crédito a mano, están en el trabajo, se les olvida o quieren pensar más detenidamente con que cantidad contribuir. Pero la mayoría al final lo van a hacer, así que paciencia, paciencia y paciencia.
He recibido varios comentarios del tipo “Ui, suerte que he visto el nuevo post en Facebook, que ya se me había olvidado”; son 40 días y se pueden hacer muy largos si nos obsesionamos o estamos pendientes de que nuestros familiares y amigos hagan sus donaciones… si lo quieren hacer, lo van a hacer, ni que se tomen una semana o 10 días, al principio me preocupaba pero en seguida ves que no es necesario :)

10. Conclusión


Ha sido una experiencia increíble, que ha implicado a muchas más personas en el proyecto que si yo solo por mi cuenta me hubiera puesto a publicar un libro, y así le da mucho más sentido al que ya para mi podía tener. Gracias, gracias, gracias!
En el caso de las recompensas se ha producido un efecto que no esperaba, y es que menos gente se ha interesado por las recompensas de bajo coste, y más por las de mayor. En este proyecto, no ha habido una colaboración masiva de personas anónimas aportando en las recompensas bajas, y si menor número de personas aportando cantidades mayores. Esto dependerá mucho del proyecto y del círculo de contactos de cada uno y me parece difícil de predecir a priori… pero sin duda tiene repercusiones en el desarrollo de la campaña (y en el importante análisis de las recompensas).
Comparando con otros proyectos de crowdfunding he observado grandes diferencias en el número de cofinanciadores totales… algunos proyectos, por su propia índole, atraen muchos más usuarios anónimos, y otros, requieren mucho más apoyo de contactos cercanos…
Quizás hubiera sido buena idea por mi parte, ir twitteando cada vez que alguien colaboraba, enlazando con su blog o twitter y recompensando también así su aportación.
Mi valoración final es muy positiva y recomendable; como todo, requiere tiempo, esfuerzo y dedicación, pero los beneficios van mucho más allá de la financiación, y merece la pena.
Van apareciendo críticas a Kickstarter sobretodo por el poco filtro que están aplicando, publicando todo tipo de proyectos (¿y eso es bueno o malo?) y por su poca preocupación en velar por el cumplimiento de los compromisos de los autores, la transparencia, etc. Por mi experiencia, Goteo cuida mucho estos detalles y por su propio interés en que los proyectos seleccionados salgan adelante, van ayudar en lo que puedan para que así sea…
Quería acabar con la referencia de Álvaro Neill, el Biciclown, que fue el primer proyecto de crowdfunding en el que colaboré y que me inspiró… su documental La Sonrisa del Nómada.
Si quieres, todavía puedes colaborar con el proyecto de publicación del libro “La Vuelta al mundo Puerta a Puerta“.

Algunas referencias:

Todas las fotos son de mi autoría bajo CC: http://www.flickr.com/photos/elrentaplats/