bitácora de sheik

Cristina Padilla, a través de la Revista en Ciencias Sociales y Humanidades Apoyadas por Nuevas Tecnologías publicó su primera columna en el portal www.reeditor.com
Se las recomiendo, sobre todo para aquellos que, como yo, no podemos dejar las redes sociales fuera de nuestra cotidianidad, ¿te atreverías a cerrar tu facebook?

Ayer en mi viaje obligado a la FES iztacala (de por lo menos una vez al mes) me tocó presenciar algo de lo más extraño, no había escuchado tal forma de pedir dinero en todos los años que llevo viajando en transporte público.
Era un señor invidente de aproximadamente sesenta años, de piel clara, cabello un poco largo y enmarañado, con una chamarra color café oscuro y pantalones grises, claro que también portaba el clásico bastón para guiar su camino.

En nuestra vida cotidiana decidimos
casi cada cosa que hacemos y cada cosa que dejamos de hacer.
Nuestra participación en nuestra vida
no sólo es posible, sino que además es inevitable.
Somos cómplices obligados de todo lo
que nos sucede porque de una manera o de otra hemos elegido

Ahora creo firmemente en las “reconciliaciones con el pasado”. Si algo sucedió y no pudimos evitarlo, no pudimos actuar en el momento sea cual sea la razón (edad, distancia, no se tenían los medios, etc) no tenemos porqué enojarnos o actuar en consecuencia como si fuera responsabilidad nuestra, es decir, no tenemos ni siquiera razón para guardar rencor infundado.

Pues en una tarde de ocio se me ocurrió la idea de proponer un #hashtag para agrupar twitts importantes.
Lo denominé #tagmi (Tag Muy Importante) y lo publiqué como iniciativa dentro del Centro de Investigación en Tecnología Aplicada a las Ciencias Sociales y Humanidades en la página:
http://www.citeach.org/web/proyecto-tagmi/
Para monitorear el avance encontré el siguiente enlace en donde hay herramientas tanto para analizar seguidores como tags en twitter:

Debido al cierre de las diferentes webs que se encargaban de dar hosting (almacenamiento) a archivos grandes de video (megavideo, videobb, etc, etc…) me parece que la única forma que nos ha quedado para compartir en la red es precisamente el “torrent”.
Para los que no lo conocen es una red no centralizada de intercambio de archivos, no depende de una empresa o de un servidor (como sucedió con Napster, Imesh, limewire, etc) si no de varios servidores que se encargan de conectar las “semillas” (seeds) con las “sanguijuelas” (leechers) para intercambiar un archivo en específico.