Estefany Ramírez, Leo Arias y Tomás de Camino
Costa Rica
Reseña de la ponencia
El ponente Tomás de camino inició hablando de la dificultad de desarrollar comunidades y hacerlas funcionales, lo cual se basa desde su experiencia en el diseño, ya que quería desarrollar un laboratorio. Además habla del libro “Tools for conviviality” en su referencia como inspiración para producir y crear espacios para tales fines, pasando desde lo experimental hasta lo formal. En donde se pueden aplicar los conocimientos que tienen los participantes para desarrollar proyectos o hacer simples exploraciones.
El ponente opina que estos laboratorios no dependen principalmente de la tecnología, sino que se trata de la comunidad o la capacidad que hay para que otras personas compartan conocimiento entre ellos, a partir de eso cada persona puede ampliar su conocimientos y habilidades. En la experiencia del ponente se menciona que al transformar un espacio para universitarios, de colegio u externos, era importante establecer horarios hasta las 2 am porque alguien podría estar trabajando, También menciona la libertad en el uso de las máquinas sin que hubiera un sentido de propiedad. De tal forma que los espacios tengan como fin ser usados y no para que tengan dueños, haciendo que este espacio comunitario sea interesante e inclusive rebelde, proviniendo desde la autoorganización de los participantes.
Leo Arias desde su experiencia menciona que en Costa Rica aprendió de Linux hasta en la Universidad, juntándose con grupos de otras universidades, donde también encontraban a personas más experimentadas. Menciona que después de unos años empezó a notar que el software es muy rico al ofrecer varios elementos para producir software libre, por lo que se ponían retos al pensar qué tecnologías utilizar o crear en un Hackerspace. También había retos monetarios por lo que la formación de comunidades (usando la casa de alguien) fue fundamental ya que se ponían en prácticas conocimientos sobre Arduino o Linux. Abriéndose oportunidades de hacer muchas cosas, aprender entre ellos mismos y desarrollar más habilidades que les permitieron tener mejores trabajos, y posteriormente poder convertirse en un Hackerspace sin lugar físico.
Posteriormente en un charla desde los ponentes se habla sobre la creación de productos intangibles y productos tangibles. Comentando sobre por qué ocurre ahora un fenómeno “maker” relacionado con el software libre, el cual tiene una capacidad de compartir algo físico que no tiene un valor en el mercado. Siendo así que el makerspace acentúa algo que proviene desde el software libre de llevar el conocimiento sin restricciones a la sociedad y contribuir en su propio desarrollo, solo que el makerspace se aplica en la parte física.
También se menciona de cómo el software libre está limitado a un computadora, pero ahora en el hackerspace hay gente de diversas áreas y profesiones que van más allá de lo planeado en el software libre. Donde se retoman ahora más cosas que son tangibles y más reales en la vida. Abordando el hecho de hay comunidades tecnológicas pero siendo importante que no hay que depender de la tecnología, sino buscar la reprogramabilidad de lo digital. Permitiendo tener esa plasticidad tan propia de tales comunidades. Más que máquinas físicas hay buscar instrumentos que puedan ser compartidos.
También se habló de la gestión de la comuna, comentando que es recomendable usar estrategias anarquistas donde se cree fuertemente en la colaboración creando un ambiente propicio. Una de esas estrategias es impartir un curso y tratar de que estuviera poblado por estudiantes y personas con altos grados académicos para pasarlo a una forma de trabajo en plano horizontal. Los cursos no tienen que concluirse en la misma actividad, sino que se puedan acabar en otro momento o en otros cursos, haciendo énfasis en que hay que iniciar procesos infinitos o inciertos para llevar a un proceso continuo del aprendizaje. Otra cosa importante es que no haya un sentido de propiedad sobre los materiales, viéndolos como algo que se reemplaza continuamente, ya que continuamente son usados por los participantes para sus proyectos pero que igual pueden dejar otros objetos que no necesiten. Siguiendo este punto en el hackerspace no hay una idea clara sobre lo que hace cada uno de los integrantes, por lo que se abraza el caos, por ejemplo, uno de los ponentes mencionó que cuando tomaba el modelo europeo de cobrar suscripción mataba el Hackerspace. Así un punto importante fue poner un código de conducta que promueva el interés por el conocimiento compartido y para aliviar el caos fue importante “agarrarse” de otros proyectos más sostenidos que tuvieran fundamentación teórica.
Así al final se habló de la institucionalidad, de que hay una lucha en relación a que esta última no transforme al hackermaker sino al revés, para no coartar la libertad del hacker y del maker. Así que no hay que buscar relaciones jerárquicas, sino más bien horizontales, formando relaciones de ayuda mutua, en donde no solo el gobierno hace las cosas sino que los participantes también pueden tomar la iniciativa.